Los ecologistas respiran tranquilos después de saber que la finca de Monesterio, en San Lorenzo de El Escorial, se mantendrá tal y como está. El famoso empresario Trinitario Casanova, promotor de la obra, ha asegurado a EL PAÍS que en ningún momento se le pasó por la cabeza construir nada allí. Explica que todo ha sido una confusión del gerente de una de sus empresas inmobiliarias. “Él sabía que esa finca es nuestra y se la enseñó a los inversores que querían montar el parque empresarial”. Pese a que los terrenos le pertenecen, los reserva para usos agrícolas y ganaderos, que sí son compatibles con la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) que tiene la zona, que además fue finca de recreo del monarca Felipe II y tiene un palacete del siglo XVII. “Ese lugar va a seguir con sus vacas y sus caballos”, asegura.
